Nos encontramos en una situación casi de emergencia, toda opinión desde un inicio se había basado en números, cálculos y tenía un fundamento matemático, de esta forma era fácil determinar si algo estaba bien o mal. En términos simples era más fácil comprender lo que las demás personas querían decirnos.
Ahora esto no es posible, básicamente porque todos tenemos un punto de referencia muy diferente de otro, sin embargo, continuamos creyendo que las demás personas utilizan el mismo marco de referencia que nosotros. Esto para mi es realmente inquietante y es cuando nos encontramos con situaciones en las que escuchamos personas diciendo "estoy muy gorda", eso es muy grande, eso es muy chiquito, mientras otras personas ven la situación bastante diferente.
Un caso particular que compartí con mi hijo de 7 años fue el siguiente; me preguntó? "¿1000 colones es barato?", en Costa Rica 1000 colones son aproximadamente $1.6 USD (12/12/2018) y el promedio de los pasajes de autobus ronda los 400 colones si se toman rutas cantonales y 600 si se toman rutas interprovinciales dentro de la GAM, pasajes de larga distancia pueden llegar hasta 3000 colones.
Mi instinto me hizo decirle "es barat..." un momento... Realmente 1000 colones es barato? Existen familias que tienen lo básico para vivir, pero si quisieran comprar algo "de más", quizás algo innecesario pero que les genere satisfacción, por ejemplo unas palomitas de maíz para microondas; existen familias que no pueden comprarlo; y si lo ponemos menos dramático miremos la situación de mi hijo cuando le doy una moneda de 500 colones y va feliz a comprarse golosinas a la tienda, con 500 colones puede comprar hasta 5 paquetes de snacks pequeños, pero un helado grande chocolatado con maní cuesta 650 colones, entonces para mi hijo ese helado es carísimo.
En medio de mi propia confusión le di el ejemplo del helado a mi hijo para explicarle un poco la diferencia entre lo barato y lo costoso. Nada es barato, nada es costoso por sí mismo, es necesario compararlo con algo para poder saberlo.
Dudo que un alto ejecutivo gubernamental considere costosa mi casa, sin embargo me encuentro muy contento haciendo mis pagos mes a mes mientras ellos posiblemente con ese saldo saldrán a almorzar. Todo es relativo y nunca debemos olvidar de donde venimos y hacia donde vamos, porque aunque hoy eso para mi es costoso, actualmente trabajo y estudio para que mañana todo sea barato.
Otro ejemplo sencillo son las famosas actividades de fin de año, especialmente el tradicional Amigo Secreto, donde establecen un monto mínimo y nunca falta alguien diciendo: "Que poquito, pónganlo más alto... esta muy barato". Esto sin considerar la realidad de las demás personas en sus propias vidas.
Mi reflexión ante esto es muy sencilla: dar una opinión de que algo es barato o costoso debe limitarse únicamente hacia nosotros mismos con la excepción de compararlo con otro producto a la venta, por ejemplo, "esta bolsa de arroz esta baratísima" cuando la comparamos de un supermercado a otro,
¿Porque pienso que es importante realizar esto? Porque afuera hay muchas personas al igual que uno luchando y trabajando contra un mundo lleno de consumismo y nuestras palabras explicando lo barato o costoso respecto a nuestro ingreso puede verse desconsiderado y arrogante según sea la persona quien lo escuche.
